El sueño de las siete vacas gordas...

El sueño de las siete vacas gordas y las siete vacas flacas, según la filosofía Jasídica.

Rosa Anwandter

“Y se despertó...y vio, (que) era un sueño” (Genesis 41:7)

El detalle más importante del famoso sueño del Faraón es el hecho de que las vacas gordas y las vacas flacas existían simultáneamente en su sueño, diferente como fue en la vida real donde los siete años de hambruna llegaron después de los siete de abundancia.
El sueño tenía un sentido más metafórico. Josef interpretó el sueño del Faraón no sólo como una profecía de los futuros eventos, también le instruía al Faraón cómo enfrentarlos y le indicaba que los siete años de abundancia debían coexistir con los siete de hambruna. El consejo que Josef le dio al monarca es parte de la interpretación del sueño. “Si acumulas granos de los años de abundancia”, dijo Josef, “las siete vacas gordas seguirán estando allí, cuando aparezcan las siete flacas, éstas tendrán que comer”.
La corriente Jasídica, filosofía religiosa y mística al interior del judaísmo, transmite que el primer exilio del pueblo judío, se produjo luego de una sucesión de sueños.Primero los sueños de Josef, luego los del panadero, enseguida los del encargado de los vinos, y los del Faráon. Todos estos sueños llevaron a Iaakov con su familia a Egipto, donde luego sufrieron esclavitud y persecución, hasta ser liberados por Moisés. El propio exilio de Iaakov en Jarán comenzó y concluyó con sueños.

Puesto que, el exilio es en realidad un sueño, un estado de existencia donde rige confusión, horror y todo lo imposible. Un estado donde conviven la abundancia y la hambruna, en el cual una vaca puede ser simultáneamente gorda y flaca.
Veamos lo que Josef le dijo al Faraón;
“No trates de huir de tu sueño, ni le busques otros significados. Úsalo. Si el Exilio te presenta la paradoja de una vaca gorda con una flaca a la orilla del río, usa a la vaca gorda para alimentar a la flaca. Transforma el sueño mismo en la solución”.
Sabia interpretación de José el hebreo.

* Adaptación de una carta del Anterior Lubavitcher Rebe, Rabi Iosef Itzjak Schneerson.
La Ense 797 (Parshat Miketz)
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